En Incahuasi (Ferreñafe,
Lambayeque, Perú) nuestros educan en quechua, lo hacen con sabiduría del
corazón y sencillez de las técnicas pedagógicas aprendidas en los pedagógicos.
Entregan su tiempo para hablarles y enseñarles desde su lengua, narran, cantan,
les enseñan a tener orgullo de su idioma
y cultura y a ser parte de este país llamado Perú. Estoy entre los quechuas del
norte del Perú, mi amigo el profesor Evaristo
Mananay consiguió su plaza a cuatro horas de Incahuasi, me puse en contacto con
los profesores del IEPSM Nº 10084 (Virgen de Las Mercedes), que es una escuela
EBI, allí he conversado con las profesoras Cristina Calderón y Lidia Sánchez Céspedes,
profesoras de educación bilingüe intercultural. El director de la Escuela nos
ha acogido y ha autorizado nuestra presencia. He aquí un relato quechua y fragmento
de la entrevista que hice a la profesora Lidia Sánchez Céspedes.
Mallkikuna tukukaran
Por Lidia Sánchez Céspedes.
Uk kuti unayqashi mana tamya
shamutin tukuy mallkikunaqa chakir tukukaran. Chayshi runa warmi wamramapis
wamur tukukayaran. Chayshi uk wamraqa riran pachata willaq pachaqashi mana
kasuranchu. Chaysi uk kundurqa niran: nuqa lisuyta qushayki pachaman
itanoykipaq wanraqa pachaman lisuta itaran itatinqa kusata piryar wanranta
kacaran. Chayshi wamranta aypar mana qutinqa pachaqa quran wamrata tukuy
mikuyta sarata, akshuta, abasta, triquta, uqata, ima tarpukunanpaq tarpukur
tamya shamutin tukuy mikuy puquran chaynu kawsaranllapa.
Versión al castellano
En ese tiempo no vino la lluvia y
todos los alimentos se perdieron. Entonces, los hombres, las mujeres los niños
fueron hablar a la mama Pacha, pero no los escuchó. Un cóndor dice, yo te
voy dar un pugas para lo arrojes a la
Pacha. Y así fue. El niñito se fue
agarrando la puga, y dice lo soltó, entonces, la pulga le pico a la Tierra y
dejo caer a su niño. El pequeño lo cogió y no quiso darle. Entonces la Pacha
otra vez nomás devolvió los alimento, el maíz, la papa, el trigo, la oca, que
sembraron con las lluvias que llegaron y nuevamente todos tuvieron que
comer. (Versión de Gonzalo Espino).
Entrevista a Lidia Sánchez
Lidia Sánchez nació en Incahuasi
(1967), hizo su transición con un
maestro que no sabía quechua y que solía insultarlos. "Mucho maltraban -me
dice-, tenía un profesor castellano hablante. "Serranos brutos, no
saben hablar, no entienden", nos decía. No era que no entendíamos sino que,
sinceramente, no entendíamos su lengua
del profesor".
Luego sus padres lo llevaron a Ferreñafe para
que estudie porque "no quería que
nos quedemos aquí, porque se casan muy jóvenes". Con mucho sacrificio hizo
sus estudios básicos, fue la mejor alumna en primaria y secundaria, pese a la
marginación. Luego ya casada, hace sus estudios superiores.
Me recuerda que “La mayoría habla
quechua, la mayoría de las mujeres y niños son monolingües. Los varones hablan
español porque salen a trabajar a otros lados.” Le pregunto lo que le gusta de
su trabajo. “Lo que le puedo decir, cuando uno habla quechua, qué
alegría que sienten los niños y las
niñas. Cuando les cuento un cuento, una canción en quechua, cómo miran con esa
atención, es algo fascinante ver a los niños como aprenden en su propio
idioma.” Su rostro desborda alegría. ¿Con qué recuerdo te quedarías? “Con su sonrisa,
que siempre nos sorprende porque trabajamos con el quechua. Su sonrisa me
contagia.” Como los profesores que se dedican a enseñar, a enseñar con la
sabiduría del corazón y las técnicas que se aprende en la Academia, escribe en
su cuaderno de clase, anota sus cuentos y poemas.
3 comentarios:
Expreso mi felicitación al Prof. Gonzalo Espino R. Por su trabajo de investigación y difusión en favor de la cultura quechua de Inkawasi-Kañaris. Efectivamente hay fortalezas en el campo educativo para preservar y mejorar el uso de nuestro idioma y toda forma de expresión cultural de la gente en esta zona andina de Lambayeque.
Prof. Gonzalo, manifiesto mi felicitación por esta investigación, espero que continué en bien de preservar nuestro legado idiomático de la región Lambayeque
Quiero felicitar a Lidia Sanchez Céspedes, trasladando mi recuerdo al Instituto Monseñor Gonzales Burga, me siento orgullosa de tu superación profesional, pero sobre todo de que continúes conservando tus orígenes y defendiéndolo al promoverlo
Muchos éxitos hoy, mañana y siempre
Maria Córdova Pissani.
Publicar un comentario