Sobreviviente

Escribo.  No sé qué cosas.  Como aparte, mi cuarto.  Empiezo a dejar los dolores del cuerpo. Depresión. Mi perro está atento a mis movimientos. He llegado al día catorce. Y esta mañana el moche se despertó; “quieres estar un rato conmigo”. Lloro está vez de alegría, ya sé que no me va pasar nada. Todavía me agito, canso y duermo, paracetamol, duermo, ligera fiebre aparece, y se va. Mi sueño retorna al cuartel de caña de azúcar que están quemando. Las iguanas me sacan, me llevan a la huaca Faña. El Zorro rojo los ha dirigido, allí estoy, cenizo y colorado. Mi cabello largo está hecho trizas, horrible, quebradizo. Tengo varias peladas. Me corto mi vieja melena. La gente del pueblo se ha pasado la voz, hay un muertito en la Faña. No estoy muerto, siento, escucho, huelo. Vienen, me llevan acongojados. Dicen, “Era buenito.  Y cómo se había enamorado de la Marquina”. De verdad creen que he muerto. Y cierto, he muerto.  Soy un sobreviviente.

Solo, calenturas. Dionisio y su covid


ME QUEDÉ SOLO con susto. El sueño que se repite, aparezco en medio del

fuego de un cañaveral de AZÚCAR. 

Siento calenturas me veo con mi sarita saco MACHETE mis manos cortan rapidito nomás rápido corto presuroso corto en círculo abro un pequeño espacio la caña madura la lanzo encima fuera mí me rindo caigo todavía me llegan lenguas de fuego un ZORRO Rojo se deja acompañar de unas iguanas que empiezan a jalarme. 

Las calenturas persisten, maltrecho. Estoy cerca al abandono. 

Evito el correo, wp o contestar el fono. Evoco cada momento de vida, quiero perderme en los mares infinitos de Malabrigo o dejarme llevar por el Chicama. 

Siento fiebre, calenturas, caliente. El sueño me persigue,

Los alfileres de esta isla me agotan. Las paredes se duplican, se repiten indefinidamente trato de mirar a un solo lado. La angustia tiembla en mí.


Mierda, me jodí. Dionisio y su covid


Mierda. Me jodí. Cinco días sucesivos de fiebre.         No eran mis alergias ni los cambios de clima. No se detuvieron. Cuerpo cansado, reducido. Y mis angustias subieron a la desesperación del tren rápido. Dos días antes, Chaman, no se movió para nada, estuvo vigilante y ladró mi dolor –pienso- para que ser escuchado por los dioses. El doctor Benito explica a mi tribu: “Se vienen días críticos. Tenemos que pasar catorce días”. Me quedo desconcertado. Agotado, cansancio. Los pulmones están afectados. Calor, fiebre, fuego. Fatiga. Lloro sin motivo. Basta de mariconada, me hago el machito. ¿A qué huele esa manzana, esa cebolla, las hojas de eucalipto? Me cambio las poleras a cada rato. La fiebre me encierra: estoy en medio de un cuartel de caña de azúcar que me quema. Me registro. Llamo al 107. Entro a la plataforma Nacional de los Contagiados. DNI 07207593.  Me dan algunas indicaciones.  “Controle su fiebre, anote su saturación. Tome solo paracetamol”.  Paracetamol, paracetamolparacetamol.





Estás inventando.

 

 

¿Tienes perro?

¿Dónde está tu ficha médica?

A nadie le consta, o ¿sí?

Ya no vives en el valle de la azúcar.

No apareces en el Registro. 



COGER



video-poema de Gonzalo Espino Relucé.

Medido


Si escribo, trece jóvenes nos matan

si pongo la policía intervino 

las mujeres no tenían mascarillas

nadie reanima, no recuerdo nada.


La verdad, ta normal, mejor volvamos

la vida no vale nada, cerveza

multa, hedor, desesperado miedo 

perversa angustia, pérdida, muerte 


La vida, lo sabes, no vale nada. 

uno a uno va, colapso, en su borde

sacan heridos, van sacando muertos 


Todo han muerto, ahogados.  Sigo 

en la botella. Es inaceptable 

la vida no, no vale nada. Vida.



Nota al lector subraya el poema para leerlo completo.
Gonzalo Espino Relucé de Medido Ejercicios espirituales

El corpus de la poesía quechua contemporánea


Apu Taruma, fotografía L.C.

Hablaré de algunas proposiciones que se desarrollan en mi próximo libro Harawinchis, Antología de la poesía quechua contemporánea (1904-2021).

  1. La poesía quechua contemporánea forma parte de la historia y la cultura del Sur.


  1. Textualidad e historia.  Bajo dos premisas.

  1. La literatura y la producción textual quechua no es reciente, acompaña la historia del pueblo andino quechua. El punto de partida será la historia universal de occidente: 1532 (1492).

  2. Arraigo oral y su tenaz resistencia y cambio a lo largo de la historia.


  1. Prefiero hablar de la palabra-voz y la palabra-escritura en lugar del par mecanicista oralidad/escritura. 


  1. La escritura quechua –con la letra que escribo- viene desde 1560 cuando Fray Domingo Santo Tomás publica su Grammatica y su Lexicón de la lengua quichua.  

Observación: 

1.- Discutir la letra de occidente –español- respecto de la voz y “letra prestada” –quechua-. 

2.- Tecnología de la escritura: Implicancia de L1 (cultura quechua) > L2 (cultura de occidente) , L1 (escritura quechua en el alfabeto latino).


  1. El rapto de la escritura es un proceso moderno. Los quechuas al igual que otros grupos y poblaciones vieron en la idea del progreso una alternativa para su desarrollo. La escuela era el camino. Los quechuas se educan en una lengua y cultura que los occidentalizan.


  1. La escritura en español para el quechua termina en una lengua que no dice las cosas y sentimientos del runa. 

  1. Aprende castellano. Escribe en español, pero su universo de referencias será la cultura oral quechua.

  2. Escritura quechua permite dar un horizonte a esas sutilezas, sensibilidades y memorias de la gente. 

  3. Escriben literatura en esa lengua.


  1. La escritura pasa por un proceso en el que podemos hablar de mediadores, intelectuales indigenistas que escriben en quechua a intelectuales indígenas (sujetos de cultura). ¿Qué tipo de intelectual es el que escribe en Pacha huarai (1904)?, ¿qué tipo de intelectual son Kilko Warak’a, Kusi Paukar o J M Arguedas?, o  ¿qué tipo de intelectuales son escritores como Percy Borda, Irma Álvarez Ccoscco o la virtuosa poeta Olivia Reginaldo?


  1. Trabajo el concepto de largo tiempo. Es decir, miro el proceso como hechos culturales que se producen en periodos más o menos extensos. No adscribo el concepto generación. 


  1. En mi artículo “La poesía quechua: rapto de la escritura y corpus contemporáneo (siglos XX y XXI)” <https://revistasinvestigacion.unmsm.edu.pe/index.php/sociales/article/view/16793> adelantó mi propuesta. Aquí la preciso:




 

  1. El quechua como tal se expresa en una diversidad de lenguas. Voy más allá del reconocimiento de dialectos.  Y por ello postulo los desarrollos desiguales en el campo de la escritura y la literatura y las formas de “aldeas letradas quechua”.  Pienso, por ejemplo, ¿se han registrado producciones quechuas en el quechua Norteño (Incahuasi) o el quechua amazónico?  Cómo leerán en mi libro Harawinchis, incorporo varios núcleos que tienen que ver con lengua-territorio, quechua de Ancash y el Amazónico; y a la vez, con otras formas instaladas en espesor de las poéticas indígenas, la literatura infantil y juvenil: 



  1. Sin duda quedan abiertas muchas preguntas. Estas son parte de mi quehacer cotidiano para repensar la poesía en el sentido de una de mis colegas jóvenes, pensar la poesía quechua como poesía, pese a que sería una literatura situada.  O como nuestros creadores jóvenes se han convertido en intelectuales indígenas. ¿Podríamos preguntarnos si existe una poesía quechua pos-vanguardista?


Así, desde ya, los invito a leer Harawinchis.

Gonzalo Espino Relucé


ESQUEMA DE Harawinchis:

PACHA WARAY

Primeras muestras (1904-1947)


D.S.V.

Inocencio Mamani

José Salvador Cavero

Mario Florián

Teodoro Meneses

Porfirio Meneses

Reynaldo Martínez Parra

Moisés Cavero Caso

Florencio Segura

Túpak Amaro, Juan de la Cruz Salas y S.

Xatun Muttu/ Muttu Grande

Hijos de los Andes

Walaishuk takin


Traducciones y trascreaciones


II 

HARAWI KAMAQKUNA 

Fundadores de la tradición (1947-1962)


Kilko Warak’a, Andrés Alencastre Gutiérrez

Kusi Paukar, César Guardia Mayorga

José María Arguedas


Traducciones y trascreaciones


III 

ANKASH SHIMIMANTA 

Los quechuas de Ancash 


Manuel Lora Camones

Anónimo

Lorgio Araujo Príncipe

César Vargas Arce 

Didí Cadillo Rosas 

Edgar Alberto Norabuena Figueroa. 

Macedonio Villafán Broncano


IV

ANCHA KUSIKUY QICHWA

Euforia quechua (1962-1980)


José Tapia Azac

Lily Flores Palomino

Víctor Domínguez Condezo

Delia Blanco Villafuerte

Feliciano Padilla

Willian Hurtado de Mendoza


V

PUSAQ CHUNKAKUNA

Los ochenta (1980-1990)


Isidro Kondori

Teodora Ccallo

Ernesto Vargas P.

El Morochuco

David Castillo Ochoa (Ed.)

Isaac Huamán Manrique

Eduardo Ninamango Mallqui

Dida Aguirre García


VI

QANTU  KUTIMUQKUNA 

Retornos, qantus (1990-2000)


Humberto Lizama Carhuapoma 

Baltazar Azpur Palomino

Antero Jesús Barreto Ascarza

Juan Rojas de la Cruz 

Gloria Cáceres Vargas

Felipe Gerónimo Oré Ceballos

Qantus

Ranulfo Fuentes

Abilio Soto Yupanqui

Inés Acosta Chávez

Sócrates Zuzunaga

Víctor Tenorio García 

José Antonio Sulca Effio


VII

QUECHUAS TRANS-ANDINOS

(1990-2000)


Gloria Dávila Espinoza

Gerson Paredes Coz 

Dante González 

Odi Gonzales

Wilbert Pacheco Alvarez

Fredy A. Roncalla


VIII

ANTI SUYU SIMIMANTA

Poemas quechua de la Amazonía


Raúl Braga

Augusto Jipa

Orlando Ashanga

Anónimo

Lusdina Cariajano S.

Elena Romain Pua

Rosa Pingus de Visalot 


IX

ISKAY WARANQA CHUNKANTIN

La primera década (2000-2010)

Teófilo Fernandez Santa Cruz

Edgar Huancachoque Nieto

Gladis Naty Valencia Rosell  

Jesús del Ande

Nora Alarcón

Lenon Tomás Tutaya de la Cruz

Leo Casas 

Ch’aska Eugenia Anka Ninawaman 

Washington Córdova Huamán

Ugo Carrillo 

Carlos Huamán López


X

QIPA PUNCHAYKUNA

Penúltimos, penúltimas (2010…) 


Javier Pariona Salvatierra

Cleofe Prado Huamán 

Jesús Cárdenas Huayllaro

Rubén Yucra Ccahuana

Yuly Tacas

Wendy Milady Bellido Palomino

Edwin Lucero Rinza

Elizabeth Ocsa Quispe

Dominga Taype Quispe

Cintia Vargas Limasca

Saúl Gomes

Delfina Pacheco

Unqhutiy mamitay 

Einer Narváez López

Gabriel de la Cruz 

Nayda Mota 

Luis Berrocal Fray 

Deisy Gimena Huaman Atao

Olivia Reginaldo

Niel Agripino Palomino Gonzales 

Irma Alvarez Ccoscco 

Percy Borda Huayhua


XI

YACHAQKUNA

Escoleros


Julián Palacios Ríos 

José Antonio Sulca 

Víctor Tenorio García

César Vargas Arce

Diamiana Fernández Rupay 

Macedonio VIllafán Broncano

Fidel Cahuascanco Quispe

Sonia Yana Ccorimanya 

Alejandro Castillo Terán 

Marina Condori Trelles

Pool Ronaldo Vásquez Camavilca 

Aquiles Hinostroza Ayala

Nereo Aquiles Hancco Mamani